9º día: Testigos de santidad en el mundo
Mujer de silencio y de oración, Madre de la misericordia. Madre de la esperanza y de la gracia. Muchos hombres y mujeres se han hecho
Mujer de silencio y de oración, Madre de la misericordia. Madre de la esperanza y de la gracia. Muchos hombres y mujeres se han hecho
Yo soy para ti, María, y tú eres para nosotros. María, Madre espiritual, siempre en medio de la Iglesia. Cuando uno quiere dar un salto
Santa María de la esperanza, enséñanos a decir «amén» en los momentos de cruz. Estamos ante la cruz, misterio tremendo que nos cuesta entender: ¿por
Santa María, vida, dulzura y esperanza nuestra, vuelve a nosotros tus ojos y muéstranos a Jesús Los signos son pequeños: un poco de pan, un
María, que vas por la vida con los ojos abiertos, descubriendo las transparencias de Dios, intercede por nosotros. Toda la vida de María es una
«María es una dulce presencia de Madre y Hermana, en la que se puede confiar» (Juan Pablo II) La alegría es la mejor respuesta que
Atráenos, Virgen María, caminaremos en pos de ti. Cuando Jesús se vuelve y ve a los que le siguen, contempla a María y proclama emocionado:
María, obra del Espíritu, que lee en la fe su propia historia. Echamos la vista atrás para contemplar a tantas generaciones de cristianos que han
Flor del Carmelo, Madre y Guía en el camino de la santidad. Unidos a todos los peregrinos de la vida, prestando especial atención a todos