Feliz Navidad
A la intemperie,
amenazado por todo tipo
de inclemencias,
perseguido por la envidia
y la avaricia de los mandatarios.
Rechazado por la desconfianza
y la insolidaridad de los acomodados.
Condenado por el orgullo
y la soberbia de los poderosos.
Nada espectacular
ni de extraordinario,
si no fuera que, en aquello
de más ordinario,
irrumpe una intensa luz
que no descansa,
y nos reta a vivir
en la bondad y la esperanza.
Ternura e inocencia
que se hace vida en estado puro.
Bendecida fragilidad
que a todos nos hermanas
para ser fermento de cuidado
mutuo y mendigos
de amor que se entrega.
Feliz Navidad!
Mar Galceran.