ACOGIDA.
Bienvenid@s. Estáis en vuestra casa. En la casa de la Virgen del Carmen, que tiene sabor a familia, a acogida, a ternura, a cuidado de la vida concreta. Damos comienzo a la IV Semana de Espiritualidad, con el título: La familia: ¿puerta abierta o cerrada a Dios? Este primer día está dedicado a «La familia, lugar donde se cuida la vida». Os invito a visualizar a vuestra familia y a invocar sobre ella al Espíritu, que es el dador de vida, el dador de tantos dones que embellecen a las familias.
ESPÍRITU SANTO, VEN, VEN… Ven Espíritu, tú que gozas dando vida, Tu que recuerdas a Jesús, el compasivo de la vida. Ven, Espíritu Santo, el animador de la vida de cada familia.
Recordamos agradecidos, en el aniversario de su muerte, al Papa Juan Pablo II, que tanto sopló sobre la brasa de la familia para que, en ella, hubiera siempre calor.
GESTO: Puestos de pie. Abrimos nuestra puerta, abrimos nuestras manos para acoger a Jesús, amigo incansable de la vida, levantador de toda vida pisoteada, dador de vida. Acogemos a los que van a participar. Acogemos a la familia, lugar privilegiado para cuidar la vida. (Entran los que van a participar- Música de fondo)
SÍMBOLOS: Una planta y un globo (Los llevan Lucía e Isaac) Una planta que hay que mirar, regar, cuidar. La planta es símbolo de la VIDA, regalo de Dios y tarea diaria. Acoger la vida es acoger a Dios, siempre tan amigo de la vida. Se sientan todos
Comentario al texto bíblico: Ex 2, 1-10: Mujeres al cuidado de la vida
Moisés. Una vida en peligro. Vida que es contemplada por su madre como algo bello que no puede morir. Vida que es levantada por la hija del faraón, movida a compasión ante la vida a punto de desaparecer en el río Nilo. Vida puesta en relación con los que la puedan cuidar, por María la hermana de Moisés.
TESTIMONIOS
Santi, Raquel, Lucía e Isaac, y uno o una que está llamando a la puerta queriendo ver la vida. Una familia, que mira con emoción y gozo la vida, que quieren lo mejor para los suyos. Una familia dispuesta a cuidar la vida, a pesar de todo. Una familia, asombrada ante el milagro de la vida. Después del testimonio, damos un aplauso. Pausa Musical Naty Carbajo, religiosa hospitalaria, junto con sus hermanas y tantas personas hospitalarias de corazón, levantan cada día la vida caída, besan y acarician las debilidades de los que apenas tienen un hilito de belleza, danzan para ellos cada día la danza de la compasión. Aplauso y pausa Musical Javier Arribas, psicólogo de Cáritas, nos habla de la importancia de estar enterados de los lugares y personas donde se favorece el cuidado de la vida de la familia. Desconocer los lugares y personas, teléfonos, donde puede ayudarse a la vida, es dejar a las personas en la cuneta. Estar enterados, puede dar un empujón a la vida. Todos sois un regalo de Dios. Se necesitan todas vuestras manos y las de todos al servicio de la vida. Gracias de corazón. Sois una huella de Jesús, que se llamó a si mismo VIDA y que cuidó con tanta ternura la vida.
PowerPoint: CUIDAR LA VIDA AL ESTILO DE JESÚS
«Yo soy la Vida» «He venido para dar vida» «Si el grano de trigo no muere no da fruto» «Estoy en medio d e vosotros como quién sirve» Este es Jesús, así cuida la vida
Jesús mira y enseña a mirar
Mira la vida con atención Ante lo pequeño y los pequeños, le brota la ternura Se estremece ante los gestos de amor, por pequeños que éstos sean. El gesto de una viuda que da lo que tiene le llena de alegría. La vida frágil orienta su compasión. Mira lo insignificante y lo levanta para que nada se pierda Se expone a ser mirado en su anonadamiento por amor.
Jesús oye y enseña a oír
Jesús tiene el oído abierto para oír la vida. Su palabra ante todo lo cerrado es Effetá, Abrete. Le desarman los que no quieren oír. Llama «dichosos» a los que escuchan. Llama «dichosos» a los que se dicen la vida con amor Se detiene para escuchar el grito orillado de un ciego mendigo. Lo escucha. Lo llama. Le ofrece posibilidades. Así comienza su diálogo entre amigos.
Jesús comparte y enseña a compartir
A Jesús le duele el hambre de las gentes. Sus amigos no saben cómo dar de comer a tanta gente. Un niño se adelanta en su ingenuidad y ofrece lo que tiene. ¿Qué es esto para tantos? Murmuran a su lado. Pero Jesús reparte y hasta sobre. Lo poquito, compartido, es una fiesta.
Jesús acompaña y enseña a acompañar
Le han perdido el rastro a la alegría. Se les ha escondido la esperanza. Solo hay quejas, lamentos, desencanto. Y Jesús se acerca, peregrino. Y empieza a trabajar con las pobrezas. «Quédate con nosotros», le dicen a la tarde. Y Jesús les da su amor a manos llenas. Y, llenos de alegría en los adentros, vuelven a la comunidad de otra manera, a contar las cosas del Amigo.
MOMENTO DE ORACIÓN
GESTO: Levanta la planta el niño más pequeño (Isaac) y le ayudan todos los participantes. Entre todos levantan la vida.
ORACIÓN: (Lucía) Con música.
Jesús, tú que eres tan amigo de la vida, enséñanos a cuidar la vida. La vida, aunque sea pequeñita, es muy bonita. Enséñanos a mirarla con ojos asombrados. La vida de los papás es muy bonita, porque la entregan, como hiciste TÚ. La vida de los abuelos es muy bonita, porque la han comunicado a lo largo de muchos años. Gracias, Jesús, por la vida. Gracias, Jesús, por la vida que hay en cada familia. Queremos cuidar la vida. Bendícenos, Jesús.
PISTAS PARA CUIDAR LA VIDA EN LA FAMILIA
- Mira la vida, por pequeña que sea, con cariño.
- Ayuda a levantarse a quien tiene la vida frágil.
- Escucha con atención los sonidos de la vida.
- Anima a quién está desalentado.
- Perdona y vuelve a comenzar, cuando algo haya herido la vida.
- Abre la puerta a Dios, amigo de la vida.