JESÚS MURIÓ CRUCIFICADO (595-623)
I El proceso de Jesús
«Las autoridades religiosas de Jerusalén no fueron unánimes en la conducta a seguir respecto de Jesús. Los fariseos amenazaron de excomunión a los que le siguieran… el sumo sacerdote Caifás les propuso profetizando: ‘Es mejor que muera uno solo por el pueblo y no que perezca toda la nación’. El Sanedrín declaró a Jesús ‘reo de muerte’ como blasfemo, pero, habiendo perdido el derecho a condenar a muerte a nadie, entregó a Jesús a los romanos acusándole de revuelta política…» (CIC 596).
Ficha 8