Ávila, 31 de enero 1579.
Una situación humana complicada. Se requiere mucho tino para aportar luz. La comunidad de Sevilla está viviendo una situación crítica. El provincial de los calzados ha urdido un proceso, cargado de calumnias, contra Gracián, con objeto de desprestigiarle y deponer a la priora, María de San José. Lo ha secundado el exconfesor de la comunidad, Garciálvarez. Envían el proceso al nuncio Felipe Sega. Le envían también las cartas de Teresa secuestradas a las monjas. El provincial ha designado como priora a una de las más ineptas, Beatriz de la Madre de Dios. Teresa conoce el contenido del proceso, el confinamiento de la priora depuesta, la congoja de las monjas. Escribe a la comunidad. Envía la carta a través del prior de la Cartuja.
Saludo orante a ritmo de liturgia. Comienza las cartas orando. Liturgia: escuela de oración. «Jesús. La gracia del Espíritu Santo sea con vuestras caridades, hijas y hermanas mías» (C 284,1).
Amor y cruz. «Sepan que nunca tanto las amé como ahora, ni ellas jamás tanto han tenido que servir a nuestro Señor como ahora que las hace tan gran merced que puedan gustar algo de su cruz con algún desamparo del mucho que Su Majestad tuvo en ella.
Sigue el texto en F. 11: CARTA A LAS CARMELITAS DE SEVILLA