- Habita tu casa
- Descálzate y escucha
- Acoge el Proyecto de Dios en tu vida
- Aprende a mirar en la noche
- Adora el Misterio que habita tu vida
- Aprende a mirar con la luz de la esperanza
- Anuncia el amor
Espíritu dador de vida, en la interioridad del mundo mantienes viva la fuente del amor.
«Que nada sea capaz de turbar la paz de mi interior ni hacerme salir de Vos, sino que cada momento me haga penetrar más hondo en la profundidad de vuestro Misterio» (Isabel de la Trinidad)