Letra y música: José-Manuel Montesinos Suárez
En lo que soy,
Dios ahí, no yo.
En lo que quiero,
Dios ahí, no yo.
En lo que hago,
Dios ahí, no yo.
En lo que pienso,
Dios ahí, no yo.
Todo Dios, todo Dios, todo Dios…
Nada yo, nada yo, nada yo…
Solo Dios, solo Dios, solo Dios,
Nada yo.
¡Cuánta arrogancia!
¡Cuánta arrogancia!
¡Cuánta arrogancia!
Ir por la vida
siempre aferrado
a la importancia.
¡Qué prepotencia!
¡Qué prepotencia!
¡Qué prepotencia!
Contra los otros
alzar el muro
de la existencia.
En lo que eres,
Dios ahí, no tú.
En lo que quieres,
Dios ahí, no tú.
En lo que haces,
Dios ahí, no tú.
En lo que piensas,
Dios ahí, no tú.
Todo Dios, todo Dios, todo Dios…
Nada tú, nada tú, nada tú…
Solo Dios, solo Dios, solo Dios,
Nada tú.
¡Tú mira a Cristo!
¡Tú mira a Cristo!
¡Tú mira a Cristo!
No tiene nada,
no manda nada,
no impone nada.
Desposeído,
desprotegido,
arrepentido…
Tengo un “almario”
comunitario
y solidario.
En lo que somos,
Dios ahí no más.
En lo que queremos,
Dios ahí no más.
En lo que hacemos,
Dios ahí no más.
En lo que pensamos,
Dios ahí no más.
Todo Dios, todo Dios, todo Dios…
Nada más, nada más, nada más…
Solo Dios, solo Dios, solo Dios,
Nada más.
Disco: La Armadura Luminosa
Coros: Paqui Alonso
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